Él Antecedentes de adaptación Asumirá la estructuración del plan de recuperación de postcalamidad departamental en Chocó, una estrategia que tiene como objetivo responder de manera integral a los efectos adversos provocados por las emergencias recientes en el departamento. Esta labor no solo se enfoca en la restauración de infraestructuras, sino que también aborda la recuperación social y económica de las comunidades afectadas, garantizando que se recuperen y fortalezcan los lazos comunitarios.
Este esfuerzo será llevado a cabo por el gobierno de Chocó, actuando bajo un enfoque que prioriza la protección de la vida de sus ciudadanos, así como el desarrollo sostenible y el ordenamiento adecuado del territorio. Se busca, además, la dignificación de las comunidades que han sufrido las consecuencias de las calamidades, asegurando que se les brinde la atención necesaria para volver a levantarse y prosperar en un entorno seguro y renovado.
«El fondo de adaptación tiene la capacidad técnica y la experiencia comprobada para liderar este tipo de procesos. El reasentamiento de Gramalote exitoso es una muestra del compromiso y la eficiencia con la que trabajamos para transformar territorios superados por la tragedia en espacios decentes y resistentes», expresó Carlos Carrillo, gerente (E) del Fondo de Adaptación. Este compromiso no solo se refleja en palabras, sino también en acciones concretas que buscan mejorar la resiliencia de las comunidades ante futuros desastres.
Nota recomendada: Por lo tanto, los recursos millonarios del desabrochado se asignarán en Chocó para asistir a calamidades. Se reconoce que la recuperación de las comunidades afectadas requiere de una inversión significativa, y estos recursos serán fundamentales para implementar diversas estrategias que permitan un regreso a la normalidad.
Carrillo subrayó que para llevar a cabo este ambicioso plan es fundamental la formación de un comité técnico. Este comité será responsable de trazar un
mapa de ruta para la contratación del equipo especializado que se encargará de ejecutar el plan, así como la creación de una metodología de priorización territorial que maximice el impacto de los recursos. Una vez que se identifiquen las áreas más vulnerables del departamento, se procederá a definir las comunidades que recibirán el apoyo necesario, así como la distribución equitativa de los recursos asignados para garantizar que la ayuda llegue a quienes más lo necesitan.