La urgencia de detener la pérdida de biodiversidad ha llevado a Colombia a convertirse cada vez más en protagonista en la intersección entre tecnología y naturaleza. Un reciente trabajo académico titulado Inteligencia artificial para la conservación y uso sostenible de la biodiversidad, una visión desde Colombia destaca cómo la inteligencia artificial (IA) se está aplicando de manera pionera para conservar y gestionar los recursos biológicos del país.
¿Qué se está haciendo?
- Analistas y biólogos han comenzado a utilizar modelos de IA para identificación automática de especies a partir de imágenes y grabaciones de audio, permitiendo acelerar el trabajo de campo que antes era manual, lento y costoso.
- Se utilizan sensores acústicos, cámaras trampa, drones y otras tecnologías que generan grandes volúmenes de datos (imágenes, sonidos, videos). La IA ayuda a procesar estos datos masivos para detectar patrones, amenazas o cambios en los ecosistemas de manera eficiente.
- Una de las aplicaciones revisadas en el estudio es su enfoque en el contexto colombiano y neotropical, donde los ecosistemas, la diversidad cultural y los desafíos de conservación tienen características particulares que exigen soluciones adaptadas.
- Un ejemplo concreto: otro informe describe un proyecto que creó un “conectoma” del bosque tropical en Colombia usando micrófonos para registrar sonidos de fauna y vegetación, y luego la IA analiza cómo se conectan y cómo ese ecosistema cambia en función de diferentes condiciones.
¿Por qué es importante para Colombia?
- Colombia es uno de los países con mayor biodiversidad del planetalo que significa que aprovechar la IA aquí tiene un gran impacto tanto a nivel local como global.
- La combinación de tecnología de punta con conocimiento local y regional puede fortalecer las políticas de conservación, permitiendo intervenciones más rápidas, precisas y rentables.
- Este tipo de sistemas impulsan la justicia ambiental, al brindar a las comunidades y territorios locales más herramientas para proteger su patrimonio natural.
Retos y aspectos a considerar
- Los autores del estudio advierten que no basta con implementar tecnología: hay que abordarlas problemas de calidad de datosde representatividad de los ecosistemas, así como la adaptación del modelo de la IA al contexto colombiano (clima, vegetación, especies endémicas, etc.).
- Otro punto clave es el ética y gobernanza: quién tiene los datos, cómo se utilizan, cómo participan las comunidades locales y cómo esta tecnología respeta los valores culturales y ecológicos de los territorios.
- Finalmente, aunque la IA mejora la velocidad y la escala del monitoreo, no reemplaza el trabajo de campo, el conocimiento tradicional y la acción comunitaria; Es un complemento, no un sustituto.
¿Qué viene ahora?
- Se espera que estos sistemas se expandan: más sensores, mayor cobertura geográfica, integración con satélites, drones y plataformas de análisis en tiempo real.
- Los investigadores instan al desarrollo políticas públicas que promuevan su adopción responsable, que los presupuestos incluyan tecnología de conservación y que la cooperación internacional apoye la capacitación local.
- Para el ciudadano medio, significa que pronto podríamos ver aplicaciones, programas escolares, recorridos ecológicos o iniciativas de ciencia ciudadana que utilicen la IA para identificar especies, advertir sobre amenazas o contribuir a la protección del medio ambiente.
Este nuevo enfoque, donde ciencia, tecnología y naturaleza se unen para cuidar lo que hace de Colombia un país único en biodiversidad, marca un avance esperanzador. La IA ya no es sólo un tema de laboratorio, sino una herramienta tangible para preservar los ecosistemas, las especies y el patrimonio natural para las generaciones futuras.
 
								 
															





