Forbes Colombia ha desvelado su tradicional lista de las 100 mujeres más poderosas del país, un reconocimiento que incluye a figuras destacadas como la gobernadora de Tolima, Adriana Magali Matiz, y la alcaldesa de Ibagué, Johana Aranda. Esta situación no es nueva para ambos líderes políticos, ya que es la segunda vez que se destacan por su influencia y capacidad de liderazgo en un ambiente que suele ser dominado por hombres. La inclusión de sus nombres en esta lista no solo resalta la creciente presencia femenina en el ámbito político, sino que también refleja un importante cambio en la percepción pública sobre el liderazgo femenino.
Según la publicación, «Forbes reconoce a quienes logran romper los techos de vidrio en diferentes ramas». Esta lista fue elaborada sin seguir la estructura jerárquica tradicional, siendo construida por un equipo editorial que trabajó en colaboración con expertos de diversos campos. De esta manera, se buscó aplicar la metodología utilizada por la empresa matriz en los Estados Unidos, asegurando que los criterios de selección sean relevantes y justos.
La aparición de Matiz y Aranda en el listado ha generado reacciones diversas y significativas. En 2024, su inclusión ya había sido destacada, y la repetición de sus nombres en 2025 subraya, según Forbes, su prominente posición política tanto en el ámbito regional como en el nacional. Este reconocimiento es un hito que puede incentivar a más mujeres a participar en la política, demostrando que el cambio es posible.
Bajo el vidrio de agrandamiento
A pesar de esta valiosa distinción, ambas administraciones se encuentran atravesando un periodo de considerable desafío. Menos de un mes después de que se entregó el gobierno a la oficina de la alcaldía de Ibagué, la administración se enfrentó a una serie de críticas importantes en relación con la gestión del coliseo local. Estas críticas surgen a raíz de las supuestas irregularidades en los procesos de reclutamiento, supervisión y recepción de servicios, lo que ha encendido alarmas sobre la transparencia y la eficacia en la gestión pública.
Este hecho ha puesto bajo el microscopio tanto la gestión de Matiz como la de Aranda, no únicamente en lo concerniente al Coliseo, sino también en otros aspectos de gestión administrativa y negociaciones. Diversos controles ciudadanos han apuntado a un posible descuido y una falta de control en cómo se implementan y utilizan los recursos públicos en estas localidades.
La inclusión de estos dos funcionarios en la lista de Forbes ha suscitado debates significativos. Algunas industrias consideran que su aparición en este tipo de lista refleja una especie de número político que históricamente ha estado reservado para hombres, mientras que otros argumentan que un escándalo recientemente revivido podría eclipsar los beneficios que conlleva tal reconocimiento.
Aunque la lista de Forbes tiene como objetivo resaltar el liderazgo y el empoderamiento, el contexto en que se publica es crucial. En medio de una crisis institucional relacionada con el Tolimense Sport, se abre un nuevo debate sobre el verdadero ejercicio del poder, la responsabilidad y la posibilidad de transformación que estas figuras realmente representan para la sociedad.
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