

Un destacado piloto colombiano, Édgar Armando Burbano Benavides, fue capturado recientemente en Bogotá debido a su supuesta implicación en una red internacional de tráfico de drogas con conexiones en la República Dominicana. La acción fue llevada a cabo por agentes de la Dijín, en colaboración con Interpol y la oficina del Fiscal General, como resultado de una circular roja emitida por las autoridades dominicanas.
Burbano, quien tiene 57 años, es conocido no solo por su carrera como piloto, sino también por haber sobrevivido a un trágico accidente aéreo en 2006 en El Embrujo de Providencia. Desde entonces, ha realizado diferentes actividades, incluidos proyectos relacionados con la propiedad inmobiliaria en Bogotá y la operación de vuelos charter, después de abandonar la aviación comercial en 2020. Su nombre ha estado asociado a varias compañías de taxis aéreos que han sido cruciales para el transporte de pasajeros y mercancías tanto en Colombia como en Estados Unidos.
Según un expediente abierto en la República Dominicana, la Oficina Especial del Fiscal de la Antilavado de Activos y Financiamiento del Terrorismo ha acusado a Burbano de operar aviones con el fin de transportar drogas desde Colombia hacia el Caribe. Uno de los incidentes más comprometedores de esta red ocurrió en 2017, cuando un avión que salió de Cartagena realizó un aterrizaje irregular en el aeropuerto de La Romana. Durante este evento, se verificó que el avión había hecho cambios de luces y se detuvo en una zona oscura durante aproximadamente 15 minutos, momento en el cual supuestamente descargaron una carga de narcóticos.
Además de Burbano, las investigaciones han involucrado a otros tres ciudadanos colombianos que también figuran en el expediente. Las autoridades dominicanas han establecido vínculos entre el piloto y delitos de lavado de dinero, indicando que parte de su logística incluía la entrega discreta de medicamentos. Este aspecto de su operación se llevó a cabo con el objetivo de no ser detectados por las autoridades pertinentes.
Burbano fue detenido en un área residencial exclusiva de Bogotá, un lugar donde ha mantenido un estilo de vida ostentoso y aparentemente ha utilizado otro nombre para evadir el rastreo. En este momento, se encuentra bajo custodia de la oficina del fiscal, a la espera de los procedimientos necesarios para su extradición hacia la República Dominicana, donde se enfrentarán graves cargos en su contra.