Colisión interna: aliados de Bolívar Fustiga y alerta de petro sobre autoritarismo electoral – Cronica alterna

La izquierda en Colombia está pasando por uno de sus momentos más delicados desde la llegada de Gustavo Petro a la presidencia. Este nerviosismo se desborda con dos focos de voltaje: las acusaciones de traición interna de Gustavo Bolívar y los obstáculos impuestos por el Consejo Electoral Nacional (CNE) a la consolidación política del pacto histórico.

Acusaciones de traición dentro del pacto histórico

Gustavo Bolívar, una de las voces más fuertes y visibles en el sector progresivo, ha denunciado públicamente que dentro de su coalición «traiciones». Sus frases han sido contundentes: «Varios senadores y senadores, incluso del pacto histórico, se convirtieron en el último minuto. El precio de las ratas no decepcionó cuando se trata de degradación de la política y la justicia». A pesar de esto, evitó mencionar nombres específicos, agregando un halo de incertidumbre y especulación. Debe recordarse que esta acusación surge después de la derrota del presidente Petro en una elección para el Tribunal Constitucional, un evento cuyo voto era confidencial.

CNE ralentiza la consolidación de la izquierda

Al mismo tiempo, el CNE ha pospuesto decisiones cruciales para el proyecto político del pacto histórico, que incluye:

  • La homologación y la fusión formal de los partidos que conforman la coalición (Colombia humana, polo democrático, Unión Patriótica, Mais) en una sola comunidad política.
  • La autorización de una consulta interna, programada para el 26 de octubre, que elegiría tanto al candidato presidencial como a la lista al Senado unificado del bloque.

Estos retrasos generan preocupación, ya que la ley limita la posibilidad de formar listas conjuntas si las partes, como ahora, tienen un alto voto anterior. Para que el pacto histórico actúe como un fuerte bloque electoral, necesita el respaldo del CNE y aún no lo hace.

Petro: un «autoritarismo» para excluir a la izquierda

El presidente Petro, de Japón, no ocultó su frustración: describió las maniobras del CNE como «una acción dictatorial de Uribismo y sus aliados» cuyo objetivo sería excluir el pacto histórico de las próximas elecciones. Ha solicitado explícitamente una movilización popular en defensa de la democracia y contra lo que considera un intento de golpe suave.

Aumento de la carga institucional y política

A estas tensiones se agrega la investigación electoral inaugurada por el CNE para posibles irregularidades en el financiamiento de la campaña presidencial Petro. Aunque el Tribunal Constitucional lo suspendió provisionalmente, el procedimiento permanece abierto y es un factor de presión política adicional.

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