Las tensiones comerciales entre China y Estados Unidos han escalado considerablemente tras la reciente advertencia del gobierno chino. Beijing ha declarado que no tolerará que otras naciones firmen acuerdos comerciales con Washington si estos afectan sus intereses económicos. La postura oficial de China es clara: «No aceptaremos acuerdos a nuestro costo».
El Ministerio de Comercio de China fue explícito en su advertencia, aseverando que todos los intentos por negociar compensaciones arancelarias que impliquen sacrificar las relaciones con China serán contrarrestados con medidas recíprocas. «Nunca aceptaremos esta situación, y adoptaremos contramedidas adecuadas a la conclusión», se lee en el comunicado emitido desde Beijing.
Las advertencias que provienen de la capital china llegan en un momento crítico, en el que más de 60 países están en conversaciones con la Casa Blanca respecto a posibles exenciones de las tarifas impuestas por el gobierno de Trump.
Presiones de Washington: exige limitar los negocios con China a cambio de compensaciones
Estados Unidos ha iniciado una iniciativa comercial cuyo objetivo es restringir la influencia de China en la economía global. Fuentes de noticias como Bloomberg y Reuters informan que Washington está dispuesto a reducir aranceles bajo la condición de que sus socios limiten la importación de productos chinos o aquellos que contengan componentes fabricados en China.
Países como Vietnam, Japón, Corea del Sur y Taiwán ya están tomando las riendas para garantizar que se mantenga el mercado estadounidense, mientras que otras naciones analizan cómo el comportamiento de Estados Unidos puede afectar sus economías para evitar posibles sanciones. Incluso se ha discutido la posibilidad de implementar «tarifas superiores» contra terceros países que continúan colaborando con la industria manufacturera china.
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Desde la perspectiva de Beijing, esta estrategia de Estados Unidos tiene como fin aislar al país del comercio internacional. Sin embargo, desde el gobierno chino se enfatiza que el avance contra su país no garantiza estabilidad: «El progreso no se traducirá en paz y el compromiso no traerá respeto», insisten sus voceros.
Beijing intensifica su diplomacia y lanza advertencias: todos perderán; Posición de China: «No aceptaremos acuerdos a nuestro costo»
En respuesta a las estrategias de Washington, China ha incrementado su actividad diplomática. El presidente Xi Jinping ha fortalecido los lazos con naciones del sudeste asiático y Europa, apoyando una narrativa de libre comercio que contrarresta lo que considera «amenazas unilaterales» provenientes de Estados Unidos.
El Ministerio de Comercio de China ha indicado que «negociar con China en esta situación es comparable a intentar desafiar a un tigre», advirtiendo que todos los países que intenten excluirse sufrirán consecuencias económicas significativas.
Expertos internacionales, como Bert Hofman del Banco Mundial, opinan que la presión ejercida por Estados Unidos podría no lograr los resultados esperados, debido a una política que podría estar mal dirigida. No obstante, también reconocen que países como Vietnam, que dependen en gran medida del comercio con Estados Unidos, podrían encontrarse en una posición sin muchas alternativas viables para desarrollar su estrategia comercial.
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