El 11 de septiembre de 2025, el gobierno nacional aceptó formalmente una propuesta para cortar 10 mil millones de pesos al presupuesto de gastos proyectado para 2026, ajustando su propuesta original de 557 mil millones de pesos a aproximadamente 547 mil millones.
Este ajuste presupuestario responde a la falta de consenso en el Congreso para aprobar la cantidad original y la presión política para que el proyecto sea viable en las comisiones económicas de la Cámara y el Senado.
A continuación, presento los detalles más relevantes del proceso, los efectos esperados y las reacciones de los diferentes sectores:
Antecedentes del proyecto presupuestario
- Presentación inicial del presupuesto y la reforma fiscal
 El gobierno de Gustavo Petro había propuesto un presupuesto para 2026 de 557 mil millones de pesos, basado en una reforma fiscal de 26.3 mil millones para cubrir el déficit fiscal proyectado.
 El proyecto de reforma incluyó cambios en la estructura del IVA, el aumento del impuesto sobre la renta para las personas naturales, los impuestos al carbón y los ajustes de impuestos sectoriales.
- Falta de apoyo legislativo
 En el Congreso, varios sectores políticos expresaron resistencia al monto propuesto, alegando que implicaba sobrecargar impuestos o presentar gastos poco realistas.
 Las comisiones económicas conjuntas eran necesarias para abrir negociaciones con el ejecutivo para ajustar la cifra.
- Acuerdo para recortar 10 mil millones
 El resultado de las negociaciones fue una presentación presentada por el representante Olga Lucía Velásquez (Partido Verde), que modificó el proyecto al reducir el gasto en 10 mil millones de pesos.
 Con ese recorte, la cantidad aprobada en el primer debate por las comisiones se volvió 546.9 mil millones de pesos.
Impacto en los sectores y la distribución del borrador
El ajuste de 10 mil millones no se limita a un solo elemento: afecta tanto el gasto operativo (nómina, transferencias, costos operativos del estado) como los recursos destinados a la inversión.
Algunos de los efectos estimados:
- La inversión pública se reduciría de 88.7 mil millones a aproximadamente 85.2 mil millones, lo que representa un recorte de 3.5 mil millones.
- El gasto operativo (servicios, personal, transferencias) perdería alrededor de 6.4 mil millones, en aproximadamente 359.31 mil millones.
- En términos sectoriales:
- Defensa y seguridad (Ministerio de Defensa + Policía) enfrentaría una reducción en el gasto operativo de 1,5 mil millones.
- La salud perdería alrededor de 1.100 millones.
- La hacienda vería recortes de aproximadamente mil millones.
 
Estos ajustes tienen como objetivo contener el déficit fiscal proyectado en medio de un escenario de menor crecimiento económico y menor disponibilidad de ingresos fiscales.
Riesgos, críticas y apoyo
Crítica
- Facinanciación de sectores clave: Los analistas advierten que los recortes pueden afectar la calidad de los servicios públicos, la infraestructura y la capacidad de inversión estatal para el desarrollo regional.
- Insuficiencia de ajuste: Representantes del gremio como Amcham Colombia y Fenalco han indicado que cortar mil millones no es suficiente frente al desequilibrio fiscal. Piden recortes de gastos más profundos antes de las nuevas cargas fiscales.
- Incertidumbre sobre la reforma fiscal: El monto recortado implica que la propuesta de reforma fiscal también debe ajustarse: 26.3 mil millones irían a 16.3 mil millones de pesos para buscar financiamiento.
El gobierno apoya y argumentos
- El Ministerio de Finanzas, a través de su titular Germán Ávila, defendió el recorte como un paso pragmático para garantizar la aprobación del presupuesto y evitar el estancamiento legislativo.
- También se ha alegado que parte del alivio proviene de las operaciones de deuda y la refinanciación que reducen los costos de servicio para 2026.
- El consenso alcanzado con las comisiones económicas evitaría que el ejecutivo recurra nuevamente al mecanismo de emitir un presupuesto por decreto, que había generado críticas en años anteriores.
Estado actual del proyecto y los próximos pasos
- Con el recorte aprobado en el primer debate por las comisiones económicas, el proyecto presupuestario para 2026 ya ha obtenido un paso decisivo en el Congreso.
- Ahora debe continuar su tránsito a través del Senado plenario y la Cámara para los debates finales y por su eventual sanción presidencial.
- Las decisiones sobre la reforma fiscal ajustada (16.3 mil millones) serán clave para que el presupuesto sea financieramente viable.
- Si el Congreso rechaza el presupuesto, el gobierno podría verse obligado a emitirlo por decreto u otros mecanismos excepcionales, una situación que ya vivía en años anteriores.
Conclusión
La decisión del gobierno colombiano de aceptar la corte 10 mil millones de pesos El presupuesto de gastos para 2026 es una señal clara del estrecho margen político en el que se mueven las finanzas nacionales. El ajuste busca garantizar una hoja de ruta viable para el gasto público, pero no está exento de riesgos: puede debilitar la inversión en servicios esenciales y profundizar las tensiones entre el ejecutivo y el Congreso. Mientras tanto, los sectores sociales, comerciales y políticos continuarán observando con la lupa de los ajustes que se proponen para la reforma fiscal, ya que la sostenibilidad fiscal del país dependerá de allí.
 
								 
															





