Todo indica que el entrenador español Ismael Rescalvo no continuará a la cabeza de Tolima Sports, después de una campaña marcada por expectativas frustradas y una actuación que dejó más dudas que las certezas. Aunque todavía no hay confirmación oficial del club, su partida parece inminente, en parte debido al interés que se ha despertado en los equipos de fútbol ecuatorianos y, sobre todo, para los malos resultados al final de la liga.
La derrota por 2-1 contra el Independiente Medellín, su antiguo equipo, selló el destino de un Tolima que no pudo clasificar la final de la liga Betplay. A pesar de una ligera reacción en algunos jonrones, los ‘Pijaos’ ofrecieron poco en una fase decisiva, siendo eliminado prematuramente y dejando fuera cuál habría sido su décima final en la primera división del fútbol colombiano.
Rescalvo llegó con el cartel de ser un técnico meticuloso y estructurado, pero sus decisiones no convencieron. Aunque Tolima agregó 36 puntos en la fase ‘All contra All’, lo que la colocó en cuarto lugar, en los jonrones del Grupo A apenas logró cinco posibles unidades, equivalente a un rendimiento del 33.3%. Su gerencia de personal, agregada a la falta de una idea de juego consolidada, fue uno de los puntos más criticados de los fanáticos.
En su defensa, el entrenador español dijo: «Somos un cuerpo técnico profesional. Llegamos al final de la pretemporada e intentamos obtener el mejor rendimiento para cada jugador. En el individuo y el colectivo hubo crecimiento, y eso tiene un valor». Sin embargo, ese argumento no fue suficiente para justificar la falta de resultados en tiempos decisivos.
Para la eliminación en la liga se agrega el fracaso en la Copa Libertadores 2025. Tolima estaba fuera en la segunda fase anterior, incapaz de superar el Melgar del Perú. Por lo tanto, el equipo de Vinotinto y Gold cerraron su participación internacional con solo dos juegos jugados, generando fuertes críticas por la pobre imagen que queda en el torneo continental.
En medio de las críticas, Rescalvo también tenía palabras para los fanáticos: «Para los fanáticos, disculparse porque no alcanzamos el objetivo de estar en la final. Este tipo de jonrones son difíciles, los detalles marcan la diferencia. Hoy dimos todo, pero no llegamos. Esto es seguir adelante», dijo después de la derrota en Medellín.
El equipo nunca logró establecer una identidad clara del juego. A lo largo de los 26 juegos dirigidos, Rescalvo probó múltiples variantes y esquemas tácticos, sin encontrar una fórmula consistente. El equipo dependía más de acciones individuales que de una sólida idea colectiva, algo que se reflejaba especialmente en la fase semifinal.
La desconexión con parte del grupo de jugadores y Wear con la prensa local también aceleró su partida. Las tensiones fueron notables en sus últimos ruedas de prensa en casa, donde estaba distante y evasiva. Si se confirma su partida, Rescalvo dejará los deportes de Tolima sin títulos o avances importantes, y con la sensación de una ilusión rota que nunca terminó de consolidar.
